Y el camino, cual mágico sierpe, va recorriendo zigzagueante, por el majestuoso bosque de piedras termales. Su destino: la ciudad de Huancavelica.
Publicado por: Martín Gonzales Taipe.

Y el camino, cual mágico sierpe, va recorriendo zigzagueante, por el majestuoso bosque de piedras termales. Su destino: la ciudad de Huancavelica.
Publicado por: Martín Gonzales Taipe.
