PRIMER INTENTO EMPRESARIAL EN HUANCAVELICA
Mientras que en Huancavelica se discutía con el gremio de industriales (Mineros), en España se desarrollaban importantes negociaciones en busca de administrar eficientemente las minas. Es así que en 1580 se dió el propósito de entregar todos los yacimientos a una sola persona (VENTURA ESPINO, ex minero de Huancavelica) quien logró el primero de Agosto de ese año una concesión de 10 años para manejar monopólicamente todos los yacimientos a cambio de un Canon del 40% de todo lo que se explotara para la Corona. Quiso Espino traer todos los adelantos de las minas de Almaden, contrato a los mejores horneros entre los que figuraban los alemanes Guillermo Engelbert y su hijo Amaldo, especialistas en fundición de Azogue. Como capataz trajo a Juan Blazco, maestro de minas de Almaden. Obviamente, las autoridades y gremio de industriales en Huancavelica le abrieron causa para no reconocer sus concesiones En estos pleitos, el audáz empresario falleció y nuevamente se retornó a los famosos «Asientos» (contratos con mineros) para la explotación y proceso del Mercurio.
Extracto resumido y recreado por Federico Salas Guevara, del libro «Las Minas de Huancavelica» del autor: Guillermo Lohmann.
