ISABEL DE LA PEÑA ALARCO DE CALDERÓN

Nació en Anco en 1918. Orgullo que representa de la mujer huancavelicana. Doctora en filosofía e historia. Catedrática de la Pontificia Universidad Católica del Perú. Presidenta honoraria y vitalicia del Concejo Nacional de Mujeres del Perú. Fue quien obtuvo el decreto ley N°17838, modificando el artículo N° 188 del Código Civil que dio participación a la mujer en los bienes conyugales. Miembro del Comité de Honor del Concejo Internacional de Mujeres con sede en París, Francia. Presidenta del Centro Permanente de Paz del Perú, miembro de número del Centro de Estudios Histórico Militares del Perú, miembro de la Junta Directiva de la Sociedad Bolivariana del Perú, miembro del Instituto Libertador Ramón Castilla, Co fundadora del Club departamental Huancavelica, sede Lima, entre muchos otros cargos.
Fue condecorada en su vida con la Orden Do Cruzeiro do Sul del Brasil, las Palmas Magisteriales en el grado de Comendador en Perú, medalla de la orden Andrés Bello de Venezuela, medalla Sarmiento de Argentina, medalla Ristori de Roma, y en 1983 fue declarada «La Donna nel Mondo», premio Sant Vincent – Italia.
Un homenaje a través de ella a muchas mujeres huancavelicanas que se podrán reseñar en el tiempo como Manuela Segura de Arias, Manuela Victoria de Victoria, Mercedes Zúñiga de Vidalón, Irene Venegas de Chávez, Corina de Loaysa, Rosario Matute de Sánchez, Victoria Garma Núñez y aún más atrás en la historia colonial: como doña María Luisa Zubizarreta.
Tuve el honor de conocerla y llevo en mi libro «Villa Rica de Oropesa» el ultimo trabajo escrito de ella, por su gentileza de prologarlo.

La encontré,»Que orgullo esta foto»
Recibiendo las felicitaciones de la Dra. Isabel de la Peña Alarco de Calderón, Prima Donna dil Mundo, historiadora de la PUCP, mujer de agallas, gracias a ella las mujeres del Perú obtuvieron el derecho a participar por igual de los bienes matrimoniales y huancavelicana de la zona de Anco.
Observa la escena el no menos laureado historiador huancavelicano Tulio Carrasco Urruchi. Ambos fueron mis tutores y conductores en mis experiencias de historiador por vocación. En el Club Huancavelica de Lima, cuando el Dr. Silvio Saavedra era Presidente de la Institución y solía invitar a literatos huancavelicanos para charlas sobre historia y literartura.