1572 TRANSPORTE DE MERCURIO DURANTE LA COLONIA

TRANSPORTE DE MERCURIO DURANTE LA COLONIA

Fue tal vez un mejor negocio que la misma extracción y mineralización del Mercurio.
En los primeros años, se hizo sobre recuas de llamas en pequeñas cantidades y se trasladaba desde los Andes de Huancavelica hasta la ciudad de Pisco en la costa peruana, utilizando la ruta de Castrovirreyna. A los pocos años, se modificó la ruta y el sistema de transporte: Se empezó a utilizar la ruta de Huancavelica – Lachocc- Villa de Arma- San Juan- para llegar al puerto de Chincha (Demoraba unos 15 a 20 días) y se reemplazaron las llamas, por mulas, la gran cantidad de estas acémilas se traían desde Argentina, de la zona de Tucumán y de Chile. Cada marco de plata en Potosí requería de 4 libras de azogue huancavelicano, lo que permite establecer que en esta ruta se trajinaron un promedio de 10,000 quintales de azogue por año.
Es importante mencionar que el eje de producción Huancavelica – Potosí, fue de sumo significado para el desarrollo de muchos negocios e industrias colaterales, en transporte, arrieros, mano de obra calificada para el manejo del mercurio líquido, comerciantes en lugares de reposo, proveedores para material de empaque, el negocio de barcos mercantes, así como fue razón para el crecimiento económico de los puertos de Chincha y Arica.
El peso y embalaje del Mercurio resultaba complicado. Se utilizó contenedores de pieles curtidas, mayormente de carnero, es decir, “BADANAS”, las que se empleaban en forma de bolsas amarradas a sus extremos con ligaduras de hilo de tralla, a razón de dos badanas de treinta libras de peso promedio. Estas dos badanas conformaban un “MAITO” y cuatro maitos hacían un quintal de Mercurio. Las provincias de Huancavelica y Jauja proveían cuero para el punto de partida y las de Arica eran confeccionadas en el centro de Chile. Para el transporte en barco se les embalaba en cajones que evitaran un peso descontrolado en el mar.
Una recua de mulas se dividía en grupos de diez animales a los que se les llamaba “Piara”. Cada piara podía ser manejada por dos hombres. Un solo asentista podía tener 4000 mulas, con el consiguiente gasto de manutención y forraje. Para acarrear el Azogue sobre el lomo de las mulas se utilizaban las “IZANGAS”, que eran aparejos hechos de totora y para cada temporada se hacían alrededor de 6000 izangas.
Desde Arica, a donde llegaba el transporte marítimo, se trasladaban 112 leguas en recuas tomando la ruta de subida ´por el Valle de Lluta o bien por Azapa, desde allí ascendían hasta Jamiraya en Putre, luego hasta la Laguna de Chungará, a los ´pies del Parinacota, para después cruzar las tierras de Carangas, para llegar finalmente a Potosí. También se utilizó la ruta que unía el valle de Tacana y la quebrada de Tacora hacia Oruro, después García Mendoza y finalmente Potosí (demoraba de 25 a 28 días)

Esta versión es bastante apretada de este transporte y ha sido tomada del libro “Historia de Huancavelica” del autor. Federico Salas Guevara. Aquellos que estén interesados en mayores detalles, contactar con el autor.

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